[trailchile] como comenzar a correr en cerro
((originalmente publicado en trailchile))
Parque Nacional LLullaillaco. II Región de Chile. Foto: Max Keith
Por cliché que sea, con el crecimiento exponencial que ha tenido nuestro deporte el último tiempo, nunca esta demás volver a revivir el post de “Comenzar a correr en cerro” y además ir actualizándolo un poco.
Primero que todo, me gustaría partir diciendo que para correr en cerro no se requiere tener experiencia previa con el running de calle u otro tipo de deportes. Cómo yo lo veo, todos tenemos la capacidad de pasar un rato agradable en los senderos, independiente del estado físico de la persona (que eso es algo que se puede mejorar con el tiempo). Siempre he creído que muchas ganas y algo de paciencia, pueden superar todos los malos momentos del comienzo; porque por otra parte, nadie dijo que correr por montaña sería fácil y es evidente que en un comienzo debemos estar preparados para sufrir un poco más de la cuenta, sobre todo si no has tenido una vida ‘activa’ el último tiempo. Ahora, si ya se cuenta con algo de experiencia en otros deportes (o en carreras de calle, que es lo típico) igual me parece que es inteligente tomarse las cosas con calma, olvidarse del reloj GPS por un rato y aprender a conectar con el cuerpo en un entorno completamente distinto al de la calle. Un periodo de ajuste será necesario y obviamente va a depender de cada uno cuanto dure este, pero sin duda, correr por senderos puede resultar algo frustrante para los que están acostumbrados a correr fuerte en el pavimento. Otra cosa que me parece valiosa rescatar, es que el trail no hace excluyente al running normal y perfectamente se pueden complementar las dos actividades, enfocándose más en una u otra dependiendo de los objetivos que se quieran alcanzar. Finalmente, a esta altura ya sabemos que el mito de que el cerro “te pone lento”, no es más que eso; un mito y, se conoce a varios que han logrado ser muy que competitivos en ambas disciplinas.
En el mundo de especialización en el que vivimos ahora, podemos encontrar un montón de equipo de alta gama para el Trail, pero me parece que en un comienzo no vale la pena gastarse un dineral en cosas que ni siquiera estamos seguros de que nos servirán o nos acomodaran. Si estas comenzando en esto del cerro, un equipo básico podrá servirte para dar tus primeros pasos y competir en tus primeras carreras, para luego de un tiempo, comprar cosas que realmente te vayan a ser útiles a la hora de pasar más horas a la semana en el cerro. Desde zapatillas especiales, hasta mochilas de hidratación y ropa adecuada, todo esto queda para una segunda instancia, donde al menos ya estemos algo más convencidos de que queremos seguir progresando en este deporte y además nos planteemos desafíos personales concretos que requieran de una mayor dedicación y preparación.
Secando las cosas después de una jornada de lluvia. Nada como un camp de trail con los amigos. Foto: Max Keith
Otro punto que me parece importante aclarar desde el comienzo, es el hecho de que si bien el deporte se llame “Trail Runing”, en un comienzo puede tener bien poco de running y mucho de walking (caminar) y eso está perfecto. Muchas veces me he topado con gente que se obsesiona por trotar incluso las pendientes más insólitas, cuando el verdadero fin de este deporte es disfrutar de la montaña al ritmo que cada uno considere adecuado. Correr por senderos se trata de ser eficientes en terrenos ‘poco amigables’ y administrar lo mejor posible las fuerzas (sobre todo en el caso de correr Ultras), por eso la importancia de conocerse a uno mismo y tomarse las cosas con calma. Si esto significa caminar más de la cuenta y tomar extrema precaución en las bajadas, que así sea y no hay nada de malo: todos pasamos por eso.
Una de las cosas que más valoro de nuestro deporte nicho, es la comunidad y la sociabilidad que en este encontramos. Si eres nuevo en esto, insisto en que no dudes en preguntar. Desde cosas técnicas sobre zapatillas y equipo hasta lugares donde correr y carreras recomendadas, con el auge de las redes sociales, hoy en día podemos usar Facebook, Twitter, Strava y –obviamente- TrailChile, para aclarar todo tipo de inquietudes y demases. En el lado no tecnológico de las cosas, también creo que hoy en día hay bastantes grupos/teams de entrenamiento (sobre todo en la región metropolitana) que pueden ser de gran ayuda para los que necesitan una mayor motivación o para los que necesitan de cierta guía más personalizada. Por lo demás, también existen más instancias donde amigos y conocidos se juntan a entrenar en algún lugar determinado solo para compartir y correr por los senderos…así que las oportunidades para conocer a otros ‘locos de cerro’ y compartir, están. Dentro de lo mismo, una de las cosas que –yo- más valoro de este deporte, es la capacidad que me ha entregado para explorar y descubrir lugares nuevos. Creo que uno de los principales beneficios que este nos da, es la autosuficiencia para poder movernos por lugares asombrosos con relativa facilidad y así mismo, convertirse en la excusa perfecta para viajar dentro de Chile a correr y conocer. Vivimos en un país privilegiado de Norte a Sur y de mar a cordillera, por favor: usémoslo!!
Si estás pensando en meterte en el Trail Running, no lo hagas con miedo ni con la idea de que esto es para gente ‘especial’, por el contrario, algunos más y otros menos, me parece que todos estamos en esto porque sin darnos cuenta, pasamos de practicar un deporte y a convertirlo en un estilo de vida que involucra más cosas. Si bien con el tiempo pueden enfocarse en completar una distancia en específica o terminar una carrera determinada, en un comienzo me parece que lo ideal es adentrarse en este mundo con una sola premisa: PASARLO BIEN. Ya habrá tiempo para mejorar la condición física, la técnica y otras cosas, pero en un comienzo la idea debiera ser simple; recorrer senderos rodeados de naturaleza, conocer gente y pasar un rato agradable en el intento.
Finalmente, hago la invitación a que todos hagamos crecer aún más nuestra pequeña comunidad pero sin generar traumas, vale decir; incorporar a las personas nuevas con experiencias amigables y no traumáticas. Aprovechemos que contamos con un sinfín de senderos para todos los niveles y seamos capaces de transmitir que al final del día, lo que importa es estar al aire libre haciendo lo que nos gusta más que estar vanagloriándonos de lo que hacemos.
Pocas cosas se comparan a la satisfacción de cruzar la meta. Foto: Max Keith